La posición de la Relatoría Especial de la ONU sobre la situación de los Defensores de Derechos Humanos es bien conocida por activistas de todo el mundo. Sin embargo, el nuevo rol establecido del Relator Especial sobre la situación de los Defensores del Medio Ambiente puede ser menos conocido, ya que apenas tiene un año.
De acuerdo con Global Witness, más de 1700 personas activistas medioambientales han sido asesinadas en la última década hasta 2021. Dadas estas cifras, es sumamente pertinente contar con un relator que se enfoque específicamente en personas defensores medioambientales. Este nuevo mandato ha sido desempeñado por primera vez por Michel Forst, quien ya tenía experiencia como Relator Especial sobre la situación de los defensores de derechos humanos del 2014 al 2020. Es el primer mecanismo internacional en el mundo que protege a personas defensores medioambientales.
Esta posición tiene sus raíces en las provisiones que se establecieron en la Convención de Aarhus sobre el Acceso a la Información, Participación Pública en la toma de decisiones y Acceso a la Justicia en Asuntos Medioambientales desde la Comisión Económica de la ONU para Europa, la semilla de la que el Acuerdo de Escazú, su convención equivalente, nació en América Latina y el Caribe. De manera más específica, el rol del Relator Especial sobre la situación de los Defensores Medioambientales proviene de la decisión de crear un mecanismo de respuesta rápida para la protección de los defensores del medio ambiente, adoptada por la Reunión de las Partes en la Convención de Aarhus en octubre de 2021. Michel Forst fue elegido para este rol por consenso por la Reunión de las Partes en su tercera reunión extraordinaria que se llevó a cabo en junio de 2022.
Cultural Survival invitó al Relator Forst a dar una declaración en abril de 2023, en el marco del Foro Permanente sobre Cuestiones Indígenas de la ONU que se celebró ese mes. Nos envió una declaración en video para compartir con los Pueblos Indígenas y simpatizantes de todo el mundo.
El rol del Relator Especial sobre la situación de los Defensores del Medio Ambiente es específicamente relevante para los Pueblos Indígenas, quienes se encuentran en la primera línea de la defensa del medio ambiente y de la tierra. De acuerdo con el Relator, la protección urgente de las personas defensoras Indígenas permanece en el corazón de su mandato. En 2021, aproximadamente el 40 por ciento de personas defensoras del medio ambiente asesinadas eran Indígenas, una cifra desproporcionadamente alta si se tiene en cuenta que los Pueblos Indígenas representan aproximadamente el 6.2% de la población mundial.
A lo largo de sus diferentes funciones en la ONU, Michel Forst ha viajado a muchos países y ha estado en contacto con una variedad de personas defensoras Indígenas, quienes, en sus propias palabras, le han enseñado que “El agua no es solo agua, los bosques no son solo madera y que [el] aire que respiramos no es solo aire”.
El Relator Especial reconoce el papel de los Pueblos Indígenas en abogar por una mayor protección del medio ambiente, desafiando las prácticas extractivas y exponiendo los crímenes medioambientales, un papel exponencialmente crucial ante la intensificación de la crisis climática. Por muy importante que sea el papel de las personas defensoras de derechos humanos y del medio ambiente, siguen enfrentándose a una serie de peligros como amenazas, ataques e incluso asesinatos. Este peligroso contexto es precisamente el que el Relator trata de abordar mediante las herramientas que tiene a su disposición.
Algunas de estas herramientas incluyen la adopción de medidas cautelares para impedir que los Estados o las empresas sigan persiguiendo a personas defensoras. El Relator enfatiza la necesidad de que estas medidas de protección se adapten a las necesidades específicas y al contexto de personas defensoras Indígenas. Otras de las herramientas que puede utilizar son los canales diplomáticos, emitir declaraciones públicas y presentar el asunto ante el gobierno pertinente. El Relator también puede llevar a cabo visitas a los países y asistir a eventos internacionales en los que debe recopilar información y recordarle a los Estados su obligación para proteger a las personas defensoras del medio ambiente. Todos estos instrumentos serán utilizados en coordinación cercana con otros mecanismos de la ONU e incluso con mecanismos nacionales con el fin de mejorar su eficacia.
Otro aspecto del trabajo del Relator se centrará en generar conciencia sobre la importancia de las personas defensoras Indígenas que protegen nuestro medio ambiente y la necesidad de poner fin a cualquier forma de penalización, persecución o acoso contra ellas.
Un aspecto interesante del mandato del Relator Especial sobre la situación de los Defensores del Medio Ambiente es que toma en cuenta que los ataques a personas defensoras del medio ambiente no siempre son llevados a cabo por autoridades públicas o actores del país en el que suceden los ataques. La mayoría de ataques se ejecutan en América Latina, África y Asia pero muchas veces están relacionados con proyectos de desarrollo de compañías europeas o norteamericanas. Michel Forst ha dejado muy en claro que su mandato tiene el poder de intervenir cuando las compañías con base en un país miembro de la Convención de Aarhus dañan a las personas defensoras del medio ambiente.
Cualquier persona, ONG o comunidad puede presentar su denuncia al Relator Especial aunque no haya agotado los recursos internos, ya que las amenazas contra personas defensoras del medio ambiente son extremadamente urgentes y las medidas para impedir que avancen no pueden demorarse. En cuanto al riesgo de represalias, el Relator Especial afirma que la seguridad de quienes presentan su denuncia es esencial y por ello, cualquier tipo de información que reciba permanecerá confidencial.
Hablando de su nuevo rol, Michel Forst declaró: “Espero poder demostrar la utilidad de este nuevo mecanismo para proteger a aquellos cuyas vidas corren peligro por proteger nuestro medio ambiente y nuestro planeta, y garantizar que puedan ejercer sin temor sus derechos que son reconocidos por la comunidad internacional [...] Sin los defensores Indígenas y sus contribuciones, nuestra sociedad sería menos libre y menos esperanzada. Por todas estas razones son nuestros héroes”. Sin embargo, Michel Forst cree que las personas defensoras no quieren ser mártires ni héroes, sino que el sistema es el que los obliga a serlo.
Photo: Jim Stanton.