En los Estados Unidos, marzo es considerado el mes de la mujer con el objetivo de conmemorar la lucha por la participación en la vida pública y la equidad de género. Además, el 8 de marzo es el día que en muchos países realizan diversos eventos entre los que destacan las marchas colectivas, lo cual se ha convertido en un movimiento social por y para las mujeres.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las mujeres Indígenas suman 238.4 millones de los 476.6 millones de personas Indígenas en el mundo; es decir, las mujeres representan el 50% de este sector. Sin embargo, las desigualdades y problemas estructurales han representado un obstáculo mayor para las mujeres Indígenas que día a día luchan por su causa y la dignificación en la vida política, social, económica y cultural.
Cultural Survival se compromete a contribuir a la construcción de comunidades más resilientes apoyando directamente el liderazgo de las mujeres Indígenas; continuaremos promoviendo sus voces de acuerdo a sus valores.Nos esforzamos por apoyar a las mujeres Indígenas para que sean quienes toman decisiones y sean las protagonistas de sus propias historias y asuman los roles participativos que merecen y que sean elegidos por ellas. A través de nuestro programa de Desarrollo de Capacidades, nuestro objetivo es apoyar el liderazgo, las capacidades técnicas, las decisiones, las luchas y las victorias de las mujeres Indígenas.
Como parte de nuestros esfuerzos, a través del proyecto Becas a Jóvenes Indígenas, CS apoya a jóvenes comunicadoras, artesanas, artistas y narradoras en sus esfuerzos por desarrollar sus capacidades, formación, investigación, producción y creación encaminadas al fortalecimiento de su identidad cultural y liderazgo. Desde CS como alianza, existe el firme compromiso de motivar la reducción de desigualdades y fomentar la participación de las mujeres en sus espacios y entornos. Presentamos a continuación el trabajo de dos de nuestras becarias del 2022.
Alejandra Santiago (hñahñu)
Es una joven Indígena de la comunidad de Santiago de Anaya, México quien ha fortalecido la participación juvenil en su comunidad a través de su proyecto radiofónico. Más allá de un intercambio entre receptores y actores pasivos, Alejandra ha logrado el involucramiento y ha motivado a la juventud en la resistencia y fomento cultural a nivel local. Con su proyecto Mets’i, ofreció a más personas jóvenes la oportunidad de compartir sus creaciones artísticas sonoras y experiencias desde la perspectiva de la comunicación comunitaria. Como joven hñahñu, Alejandra tiene la convicción de preservar su cultura e identidad; por ende, su proyecto se realizó a partir de cuatro etapas para un desarrollo integral de oportunidades: capacitación sobre la lengua hñahñu, cosmovisión del pueblo hñahñu sobre la tierra, creaciones artísticas con la juventud y cápsulas sobre la vida de cada persona participante.
A través de estas 4 etapas, Alejandra coordinó un proyecto que despertó el interés de los jóvenes de su comunidad sobre la cultura e identidad ñhañhu, además de generar alianzas estratégicas con otros colectivos para reforzar su misión. Los temas de los talleres incluyeron sensibilización de la lengua hñahñu, sensibilización respecto a las experiencias de vida sobre el respeto a la madre tierra, creaciones artísticas de guiones y creaciones de cápsulas sobre historias de vida juveniles. Aunado a lo anterior, se destacó la generación de elementos como el compañerismo como factor clave del trabajo comunitario. En palabras de Alejandra “Es benéfico tener el apoyo de otros miembros de la comunidad para una convivencia sana. (...) y es indispensable la constante y amena comunicación entre coordinador y mentores”.
La comunicación fue un elemento presente y en desarrollo constante en Mets’i, ya que a través de la creación multimedia, pero también de la construcción de acuerdo en grupo, desarrollaron diálogos desde el respeto y la empatía por su comunidad.
Alejandra finaliza sus comentarios contándonos sobre los aprendizajes y satisfacciones que le dejó este proyecto: “Siento que el liderazgo es lo más fuerte; nunca había estado al frente. Fue un gran reto personal”. Ella considera que el trabajo sigue, que es necesario dar continuidad y ser generadores de ese vínculo entre los jóvenes y los medios de comunicación.
Jimena Musicue Casso (nasa)
“La mujer es fundamental dentro de la cosmovisión y quien conserva los valores y la lengua. Este proyecto me ayudó a reafirmar mi lucha por las mujeres y el territorio, y no perder mi convicción de lucha” menciona Jimena Musicue Casso (nasa), una mujer de 18 años que vive en la zona del Cauca de Toribio en Colombia. Jimena es parte del grupo de becarios de Cultural Survival del año 2022, quien recientemente completó sus estudios de secundaria y parte del grupo de mujeres "Pensamientos Hilando"; además es integrante del Movimiento de Mujeres Nasa “Produciendo Pensamientos”, organización sin fines de lucro enfocada en promover la autonomía económica y participación política de las mujeres de Toribio.
El municipio de Toribio, Cauca, es conocido a nivel nacional por los impactos negativos del conflicto armado interno en Colombia. Según investigaciones que se han hecho en esta zona por la policía se han registrado 72 hostigamientos y un asalto entre 2003 y 2016. La policía dice que fueron 208 hostigamientos entre 2008 y 2015; y organizaciones civiles, como Proyecto Nasa, menciona que entre 1983 y 2009 fueron más de 600 hostigamientos.
Jimena menciona que la historia de múltiples violencias en su territorio está intrínsecamente relacionada con los cuerpos de las mujeres. Ella cree que para enfrentar los retos ocasionados por el capitalismo y el patriarcado en su comunidad es necesario retomar los principios de la cosmovisión Nasa, los cuales son parte del rol fundamental que tiene la mujer en la comunidad. “Caminando hombres y mujeres juntos de lado a lado, ni uno atrás y ni uno adelante, sino que juntos” menciona Jimena.
El proyecto de Jimena se enfocó en impartir capacitaciones a 15 personas de la comunidad de Toribio. Los temas de los talleres incluyeron herramientas técnicas de comunicación, programación de radio y audiovisuales. Así mismo, se fortalecieron las capacidades de comunicadoras Indígenas en el movimiento de mujeres para visibilizar sus luchas y resistencias a través de programaciones radiales y audiovisuales en el idioma Nasa Yuwe.
“Que estas semillas que hoy están como colectivo de comunicaciones sigan formando a más jóvenes, que se pueda conseguir más equipos tecnológicos, tener un espacio físico propio y generar empleo desde el colectivo de comunicadoras, con un trabajo en dirección y producción audiovisual, fotográfica y sonora de manera profesional”, dice Jimena.
