Guadalupe Pastrana nació en la comunidad Malacachtepec Momoxco, que actualmente se conoce como Milpa Alta, respirando el aire puro de los bosques de oyamel y encino de 10 mil hectáreas de su territorio. Es una de las comunidades Indígenas que aún sobrevive en las cercanías de la zona urbana y que conserva tierras de propiedad comunal, las cuales siguen siendo protegidas por el pueblo Nahua y son de los últimos pulmones de la Ciudad de México que además de oxígeno abastecen de agua y otros recursos. Guadalupe es productora de nuestro programa Radio de Derechos Indígenas en Cultural Survival desde 2021.
De niña, creció guiada por las enseñanzas de su abuela materna (defensora de los bosques de Milpa Alta) y por los ideales de su padre, abogado agrario, originario de una comunidad Nahua del Estado de Guerrero y quien durante varios años fue asesor jurídico de la Representación General de Bienes Comunales de Milpa Alta y Pueblos Anexos. Guadalupe dice: “Guardo recuerdos de lo que me formó como una mujer Nahua o Momoxca, como un juramento de defensa del territorio que cada 5 de febrero hacían comuneros y comuneras para rememorar y reforzar la lucha de nuestros abuelos y abuelas: “defenderemos la tierra primero con la astucia, luego con la ley y, si eso no es suficiente, con la fuerza”.
“Me gustaba ir a este evento (la reunión del 5 de febrero) porque podía recoger un té que abunda en nuestro territorio y que conocemos como ‘té tochel’”, dice Guadalupe. La comunidad donde creció, Malacachtepec Momoxco o Milpa Alta, está conformada por nueve pueblos hermanos que desde tiempos ancestrales habitan un territorio en común. En la actualidad, ésta y otras comunidades y pueblos originarios de la Ciudad de México, son poseedores del 48% de este territorio, es decir, cerca de la mitad de Ciudad de México pertenece de manera colectiva a Pueblos Indígenas.
A pesar de la cercanía con la zona urbana, en Milpa Alta se ha logrado mantener una fuerte conciencia sobre la importancia de conservar y defender el territorio, por lo que no han permitido la entrada de centros comerciales, cadenas de tiendas de conveniencia, cines privados, etc. La comunidad ha encabezado varias luchas importantes por la defensa de sus bosques, una de ellas en los 70’s, pues se pretendían llevar a cabo diversos proyectos inmobiliarios. Otras luchas más recientes han sido en contra de un proyecto carretero llamado Arco Sur que atravesaría sus bosques, y contra la instalación de un cuartel de la marina.
“Somos una comunidad que históricamente ha participado en la lucha por los derechos de los Pueblos Indígenas y campesinos en México”, menciona Guadalupe, y agrega que siempre ha sido apasionada en el tema de la defensa territorial al considerar a la tierra como algo que va más allá de lo material. “A pesar de siglos de saqueo y continuos intentos de despojo, muchos Pueblos Indígenas hemos logrado preservar nuestro territorio y mantener con él una estrecha relación emocional y espiritual”, indica.
Guadalupe ha admirado la lucha de diferentes mujeres Indígenas. “Como mencioné anteriormente, desde la infancia me ha inspirado mi abuela materna, mujer Momoxca, defensora de los bosques de mi comunidad. En la adolescencia –debido a su militancia política, a la fuerza, belleza y carga simbólica de sus fotografías– me inspiraba Tina Modotti”, comenta. Agrega que de forma más reciente se ha inspirado por Lorena Cabnal y Adriana Guzmán, mujeres Indígenas impulsoras del feminismo comunitario en Guatemala y en Bolivia, respectivamente; también admira a la poeta tsotsil Ruperta Bautista.
Al unirse a Cultural Survival, el contacto con compañeros y compañeras de distintas radios comunitarias del mundo es una de las cosas más satisfactorias para ella. “Es apasionante conocer y caminar junto a emisoras comunitarias de otros territorios, así como contribuir en el fortalecimiento de sus capacidades a través de talleres y encuentros”. Guadalupe afirma que ante exclusión histórica por parte de los Estados y las pretensiones de asimilar o desaparecer a los Pueblos Indígenas, éstos han construido desde siempre, alternativas de resistencia.
“La creación de nuestros propios medios de comunicación comunitarios forma parte de esa resistencia, para que las lenguas no se olviden, para que los saberes no se pierdan, para informar y denunciar cuando hay amenazas a nuestros territorios, así como seguir construyendolos y sosteniendolos de manera colectiva”. También explica que para seguir avanzando en la defensa de derecho es necesario persistir y fortalecer los proyectos de comunicación que ya existen en sus pueblos y comunidades, así como emprender nuevos proyectos y experimentar en otras áreas como la telefonía y el internet comunitario.
Guadalupe dice que una de las experiencias más agradables que ha tenido como productora ha sido la de grabar la poesía de escritores Indígenas como Humberto Ak’abal, Irma Pineda, Huber Matiúwàa, entre otros. Esto ha sido un trabajo colectivo como parte de su colaboración en la serie “Voces y Cantos de la Tierra Viva” de Radio Educación, emisora pública mexicana en la que también es productora, guionista y locutora de una serie dedicada a difundir el d, las luchas, demandas, música y literatura de los Pueblos Indígenas en México.
Como productora del programa Radio de Derechos Indígenas, Guadalupe trabaja cada día con el sueño de ver a los Pueblos Indígenas aún más fortalecidos y organizados, construyendo o consolidando autonomía, viviendo de acuerdo con sus propias determinaciones. Además, le gustaría que los Pueblos Indígenas logren estar lo suficientemente fortalecidos para detener los nuevos embates hacia los territorios, especialmente los que ya se están dando debido a la llamada “transición energética”, que requiere de toda una nueva gama de minerales que pretenden extraerse, o se están extrayendo ya, de territorios que pertenecen a Pueblos Indígenas.
Como joven entusiasta por el aprendizaje, Guadalupe tiene algunos sueños personales, como seguir viajando, emprender nuevos proyectos radiofónicos, publicar un poemario en el que ha trabajado bastante tiempo, seguir fortaleciendo sus conocimientos y capacidades respecto a temas de producción de audio y, más adelante, lograr consolidar el sueño de crear o impulsar un estudio de grabación profesional en el que se pueda grabar a artistas y grupos musicales de Pueblos Indígenas, porque, como ella explica “debo contribuir al resguardo y a la difusión de las creaciones musicales nacidas en nuestros territorios”.